La fecundación
La fecundación, también
llamada singamia, es el proceso por el cual dos gametos (masculino y
femenino) se fusionan para crear un nuevo individuo con un genoma derivado de
ambos progenitores. +Los dos fines principales de la fecundación son la
combinación de genes derivados de ambos progenitores y la generación de un
nuevo individuo, la reproducción.
Los detalles de la fecundación son tan diversos como las especies; sin embargo, existen cuatro eventos que son constantes en todas ellas:
- El primer contacto y reconocimiento entre el óvulo y el espermatozoide, que en la mayor parte de los casos es de gran importancia para asegurar que los gametos sean de la misma especie.
- La regulación de la interacción entre el espermatozoide y el gameto femenino. Solamente un gameto masculino debe fecundar un gameto femenino. Esto puede lograrse permitiendo que sólo un espermatozoide entre en el óvulo, lo que impedirá el ingreso de otros.
- La formación del cigoto y el inicio de su desarrollo.
La
reproducción humana es de tipo sexual, ya que intervienen los dos sexos:
masculino y femenino. La fecundación se lleva a cabo dentro del
cuerpo de la mujer. El pene del hombre penetra a través de la vagina de
la mujer, donde deposita los espermatozoides. Estos se trasladan
hacia el útero, donde uno de ellos se unirá al óvulo produciéndose la
fecundación. La cigota comenzará a dividirse hasta formar un
conjunto de células mayor llamado mórula. Poco a poco irá
adquiriendo forma humana y el embrión recibirá el nombre de feto.
Transcurridas 40 semanas de embarazo, el feto estará completamente desarrollado y listo para salir al exterior. En ese momento se produce el parto.
Transcurridas 40 semanas de embarazo, el feto estará completamente desarrollado y listo para salir al exterior. En ese momento se produce el parto.
Fecundación
y embarazo
A medida que el hombre y la mujer van creciendo, y por lo tanto van
madurando, llegan a ser jóvenes más adultos, se enamoran y deciden formar una
familia.
El papá y la mamá demuestran su amor con besos, abrazos y finalmente llegan a
un momento muy íntimo y especial que es tener relaciones sexuales. Al
producirse esta relación, el hombre introduce el pene en la vagina de la mujer
y de esta manera deposita allí millones de espermios, los que se mueven a
través el útero hasta llegar al oviducto.
Al llegar los espermios al oviducto, existe la posibilidad de que se encuentren con un óvulo. Si esto sucede, un espermio puede llegar a penetrar el óvulo, produciéndose así la fecundación.
Al llegar los espermios al oviducto, existe la posibilidad de que se encuentren con un óvulo. Si esto sucede, un espermio puede llegar a penetrar el óvulo, produciéndose así la fecundación.
Como resultado de esta, se forma una célula llamada cigoto y desde este momento
se tiene una nueva vida. Entonces, se habla de embarazo.
Una vez que se ha formado el cigoto, que corresponde a una célula muy pequeña
(microscópica), los oviductos se mueven y hacen que el cigoto vaya desplazándose hacia el útero. Al mismo tiempo, el cigoto se va
dividiendo para comenzar a formar el embrión. Luego de unos 5 a 6 días de
formación, este llega al útero y ahí se queda, protegido y alimentado por las
paredes del útero.
Además de los cambios que se van produciendo en el embrión, en la mujer se van formando otras estructuras que tienen como función favorecer el desarrollo y crecimiento del embrión, que alrededor del tercer mes pasa a llamarse feto.
Además de los cambios que se van produciendo en el embrión, en la mujer se van formando otras estructuras que tienen como función favorecer el desarrollo y crecimiento del embrión, que alrededor del tercer mes pasa a llamarse feto.
Estas estructuras se mantienen durante todo el embarazo, que se prolonga más o
menos 40 semanas, o 9 meses, o 260 días.